La vista desde la otra orilla… primeros vistazos a registros en RDA
Es innegable, no es fácil quitarse los hábitos de catalogador, ahora como bibliógrafa siempre que busco un recurso en nuestro catálogo me descubro eligiendo la vista en MARC que para mí resulta más clara, antes que la vista estándar u otras determinadas dentro del catálogo de la biblioteca; sin embargo esto hace que pierda ciertos elementos desde la vista del usuario promedio.
Hace unos días una colega me pidió ayuda para ver si un registro bibliográfico tenía errores o estaba incompleto, de inmediato noté que se trataba de un registro RDA –nuestra biblioteca tiene más de un mes creando registros en el nuevo código- justamente identifique esto porque estaba viendo las etiquetas: bienvenidas las |33X: 336 Tipo de contenido, 337 Tipo de medio y 338 Portador las |264 RDA Pie de imprenta y RDA Fecha de copyright, la información relacionada con la mención de responsabilidad (Atributos de los Nombres y de los Recursos |1XX y |7XX $$e), además del adiós a la mayoría de las abreviaturas del registro, etcétera. No obstante, cuando le informe a mi colega que seguramente la confusión se debía a esos nuevos campos, su respuesta no fue porque ella observará más datos en el registro, sino todo lo contario: faltaban campos de información. Cuando cambié la vista del registro a formato estándar –tal como lo ven la mayoría de los usuarios- noté que los nuevos campos de RDA en MARC no se mostraban, es decir, aún no estaban determinados para la vista en OPAC.
Me parece que aquí no hay culpables, no lo fue el catalogador por omitir información, no lo es tampoco el referencista por desconocer RDA, es más yendo aún más lejos, tampoco lo es el propio MARC 21 que aún se queda corto para poder mostrar todos las innovaciones que RDA nos ha prometido; tampoco lo es el responsable de definir los campos visibles en las plantillas o nuestro proveedor del Sistema Integrado que usamos en nuestra biblioteca (no obstante esperaríamos que nos ofrezca algunas ventajas que ya contemplen las novedades de los registros en el nuevo código). Lo cierto es que esta pequeña confusión sirve para ejemplificar el hecho de que RDA no sólo es asunto del catalogador, sino que toda la biblioteca debe estar al tanto de los cambios y de la forma como estos van integrándose en nuestro catálogo. Esperaríamos que para hacer esta transición de la forma más preparada todos dentro de la biblioteca comprendamos el por qué se está cambiando de RCAA2 a RDA, en qué consisten dichos cambios y el cómo irán integrándose esos cambios.
La literatura sobre RDA es vasta, pero la visión y discusión es exclusiva desde la organización de la información, toda va destinada a los catalogadores, lo mismo sucedió durante el período de Prueba previa a la implementación de RDA la cual se realizó considerando casi exclusivamente la perspectiva del catalogador. Esta prueba consistió en tres meses de práctica y entrenamiento de los participantes (Las tres bibliotecas nacionales de EUA y aproximadamente veinte participantes que incluían consorcios, vendedores/editores, profesores y académicos del área, así como representantes de archivos, y todo tipo de bibliotecas).
También se realizó otra prueba informal que fue abierta a una mayor parte de la comunidad bibliotecaria, la cual consistió de un cuestionario en línea aplicado a catalogadores que ya creaban registros en RDA, además de usuarios internos (otro personal bibliotecario) y externos (directivos, etc.); el cuestionario tenía tres partes: información general, creación de registros y usabilidad de los registros. Las dos primeras partes igual que en la prueba formal fueron destinadas a la visión y opinión del catalogador, en cambio la última parte recogió información de los usuarios del catálogo (internos y externos), acerca de qué notaban en los registros en RDA:
- Aquello que tenía un efecto positivo y lo que producía un efecto negativo sobre las habilidades del usuario para encontrar, identificar, seleccionar y obtener un ítem (las funciones del usuario en el OPAC según FRBR)
- ¿Qué les parecía más comprensible un registro en RDA o RCAA2?
- ¿Los registros en RDA contenían la suficiente información para sus propósitos?
Esta última parte de la prueba informal es valiosa porque como ya se vio la opinión y aportación del catalogador está bien representada, pero es necesario conocer la manera como los bibliotecarios del área de servicios se irán adaptando al cambio. Kevin McClutcheon en su artículo “RDA and the reference librarian…” muestra los resultados de la participación de los bibliotecarios de referencia de la Kent State University en esta parte de la prueba, mostrando qué beneficios y/o desventajas pudieron observar en cinco registros en RDA representativos de los cambios de RCAA2, tales como: uso de mayúsculas no estandarizado, información sobre el autor transcrito de la portada, más de tres autores enlistados, menciones de edición sin abreviaturas, y los nuevos campos para Tipo de contenido, Tipo de medio y Portador. Esto fue lo que encontró cuando se les pregunto a los siete referencistas de su biblioteca:
- ¿Nota algo sobre los registros en RDA (omisiones, inclusiones, formas de expresar la información, etc.) en comparación con los registros usuales que tenga un impacto positivo en la habilidad del usuario para encontrar, identificar, seleccionar y obtener un ítem? La mitad respondió que sí, básicamente por la información extra que recibían y que se englobó en el uso de palabras completas (adiós abreviaturas) y en la información del autor, lo cual les pareció muy útil; la otra mitad respondió que no, no notaban nada tan positivo o con mayor impacto para identificar el recurso.
- ¿Nota algo sobre los registros RDA (omisiones, inclusiones, formas de expresar la información, etc.) en comparación con los registros usuales que tenga un impacto adverso en la habilidad del usuario para encontrar, identificar, seleccionar y obtener un ítem? Aquí la respuesta fue mixta, uno respondió que sí por la falta de encabezamientos temáticos, resumen y otros elementos no relevantes en una discusión de RDA vs RCAA2; los seis restantes se enfocaron en los nuevos campos (las |33X para Tipo de contenido, Tipo de medio y Portador), pues a la mitad les parecieron irrelevantes para el usuario, y al resto les resultó un elemento de confusión pues los términos no son claros para el usuario. Debo mencionar que una limitante de esta pequeña muestra es que sólo uno de los siete participantes tenía experiencia en la catalogación y el resto sólo tenía un panorama genérico de RDA, sin embargo éste al parecer hizo algunas observaciones de valor, como el cuestionar porqué se usaban mayúsculas en un título “¿es por el hecho de que así aparece en la portada?” (el famoso “tome lo que ve” de RDA) y también apunto que el hecho de que aparezcan dos fechas (|264 la de impresión y la de copyrigth) puede tener un impacto negativo en programas de citación como Refworks al exportar registros del OPAC, “si las dos fechas son distintas, ¿cuál sería tomada por correcta?” (McCutcheon, p. 134)
- ¿En general qué registros le parecen más fáciles de entender RDA o RCAA2? Un participante respondió que RDA, y el resto dijo que eran básicamente igual de comprensibles, sobre todo por el hecho de que los nuevos campos (de nuevos las |33X) no parecen suficientemente claros para el usuario (por su terminología, pero dado que no restan información sino que suman, al final les parece un cambio modesto. Otro más hizo un comentario interesante: “Ambos son lo mismo desde una perspectiva de bibliotecario. Desde una perspectiva de usuario yo cuestionaría la necesidad de añadir campos/identificadores extras”(McCutcheon p. 134)
- ¿Considera que un registro en RDA es suficiente para realizar sus tareas en el OPAC? Las respuestas fueron similares a la anterior pregunta, la mayoría no veía grandes ventajas y les parece que no existe una diferencia real entre códigos y resultados.
¿Qué sucede entonces? ¿Esto significa que el cambio no existe? ¿RDA no es lo que prometió?… Es muy pronto para saberlo, este escrito me resulta complejo porque no estoy inmersa en su adopción, no estoy en la curva de aprendizaje necesaria para el catalogador respecto del código en sí mismo, sólo hablo como observadora, como usuaria de catálogos.
Aquí les dejo algunos registros para que ustedes juzguen por sí mismos respondiendo las mismas preguntas hechas en la prueba informal.
Otros más
En esta liga podrá encontrar ejemplos de registros en RDA tanto bibliográficos como de autoridades: MARC Record Examples of RDA Cataloging http://www.rdatoolkit.org/examples/MARC
A modo de conclusión:
No estoy de ningún modo sugiriendo que todos en la biblioteca deban especializarse en RDA, pero me parece pertinente que todos puedan tener una introducción al nuevo código para conocer las razones del cambio, los modelos conceptuales que lo cimenta, qué propone y cómo se verán esos cambios. Hasta este momento podemos decir que los registros en RDA como los de RCAA2 son comparables en términos de calidad y cantidad de información, aunque los del nuevo código contienen un poco más de información (sin abreviaturas, datos extra, los nuevos campos |33X), empero algunos causan confusión y ya se está pugnando porque sean inhibidos para el usuario y reemplazados por iconos u otros elementos más claros que la terminología elegida.
Debemos tener en cuenta que faltan otros elementos necesarios para poder ver reflejado el modelo de RDA (o FRBR con sus entidades, relaciones y atributos) en plenitud, nuestros OPAC aún no tienen todo para poder mostrar estos cambios, el propio MARC ya está preparando su sustituto para cumplir con estas relaciones. Además RDA se desarrolló con la idea de que pudiera coexistir con registros en RCAA2 (sino ¿a dónde irían todos estos?), por lo tanto son compatibles, como ya dije en un post anterior hay partes de RDA en la que los cambios son casi imperceptibles (como en la construcción de los Asientos principales), aún es pronto para saber cómo nos impactará, pero conocer estas respuestas del bibliotecario de servicios pueden servir para facilitar la transición si son tomadas en cuenta por los responsables de tomar decisiones en las bibliotecas.
Referencias bibliográficas:
- Klossner, Michael (2010). RDA for people who really aren´t looking forwardto RDA. Arkansas Libraries. 67 (3), 8-10
- McCutcheon, Sevim (2012). RDA and the reference librarian: what to expect from the new cataloging standard. The reference librarian. 53, 123-137.
- Transición a RDA: Preguntas frecuentes http://www.loc.gov/aba/rda/pdf/rda_transition_faq_june21_spanish.pdf
Quiere conocer la experiencia desde el frente debatalla, visité el blog de una catalogadora enfrentando a RDA: http://cataloguingwith.blogspot.mx/
RDA, debe involucrar a todos los actores, porque cda uno desde su óptica podrá aportar elementos necesarios para su formación y especialmente para generar que el cambio no genere ruidos en el usuario sino más bien que éstos hagan un uso óptimo de cada recurso que posea la biblioteca
! Tienes razón Letty, los lentes del catalogador no deben ser los unicos que estén observando a RDA, gracias por comentar
Bueno, de entrada sí estás sugiriendo que los bibliotecarios de servicios al público deban capacitarse en RDA -aunque no sean todos- ¿y por qué? Porque te das cuenta de que nuestros cambios en la catalogación son apenas advertidos. Pero yo quiero hacer una observación ante ello: si los cambios realmente fueran cambios sustanciales no necesitaríamos ni si quiera preguntarles si los notan, simplemente los notarían de inmediato y ellos mismos exclamarían lo maravilloso que se ven ahora… ¿Y por qué no los notan? Qué hemos hecho mal, o qué no hemos aplicado…. En primer lugar y el error fundamental es que seguimos usando Software de licencia comercial que tardarán unos 5 o 7 años en agregar algunos cambios mínimos para soportar las nuevas etiquetas, las empresas desarrolladoras de software seguramente aprovecharan «los cambios» para venderte la nueva versión que soprta «3xx» al doble del precio actual y muchos no la podrán comprar así que seguirán haciendo los registros solo para ellos… Así que yo recomiendo:
Paso # 1. Libérense de esa carga: dejen de pagar licencias y mejor páguenle a un equipo de ingenieros informáticos (no necesitan más de 5) para que desarrollen su propio suftware y que vayan actualizando el sistema «a la carta» conforme vayan surgiendo dichos cambios, hoy en día existen más de un software libre para administración de bibliotecas que son de código abierto, de tal manera que su equipo informático unicamente tendría que rediseñar en función a lo que necesitan como biblioteca.
Paso # 2. Más, mucha más información: en estos registros de muestra yo no vi 504, 505, 520, si la obra ganó algún premio de investigación, si fue el resultado de una tesis de tal grado, etcétera y más encabezamientos de materia, muchos más… antes anotábamos solamente dos o máximo tres autoridades de materia porque necesitábamos ahorrar espacio ya que el soporte eran las fichas de cartón que limitaban el espacio ¿hoy? ¿qué nos detiene? -hay tanto espacio en la red como el que podamos pagar y no es tan costoso como para hacer un drama de ello: así que a registrar ¡hasta el índice de contenido! si tenemos el tiempo de hacerlo, o pedir a nuestros ingenieros de software que a partir del isbn vincule con Google Books y nos traiga el abstract y el índice 😉
Bueno, esto es lo que yo recomendaría: registros super completos, y liberarnos de pagar licencias. Bienvenido el software libre o el software cadémico 🙂 ya no es 1980 😛 eso de pagar licencias se acabó! Casos reales: Universidad de La Plata, Argentina con software libre «Koha» y la Universidad Autónoma de Nuevo León, México con software académico «Códice»
¡saludos! y muy muy buen post 😉 nos ha puesto a reflexionar
Validos tus dos puntos Erika! Comparto tu deseo de tener registros lo mas completos posibles, sin embargo muchos catalogadores sufren de tener que cumplir con cuotas de produccion, además de la posibilidad de aprovechar la mayor cantidad de datos obtenidos de modo automático. Gracias por comentar
…y esperen a que llegue BIBFRAME 🙂 a mi me entucisama mucho porque siento que está inspirado (consciente o inconscientemente) en la creación colavorativa, filosofía de la cual parte el desarrollo del software libre 🙂 todos le metemos mano porque todo es de todos…
Sí el panorama vislumbra varios cambios prometedores
bibframe por marc21 diseñado por los marbys?