Imagen tomada de: http://www.fno.org/mar2010/still.html
Continúo con la serie de artículos relacionados al Marco para la alfabetización informacional en la Educación Superior, hoy con el tema de los Protagonistas de este cambio. Esta serie de escritos está relacionada con los cambios acontecidos en este año 2016 en cuanto al desarrollo de la Alfabetización Informacional. Tal y como lo hice en el escrito anterior les invito a todos al proceso y que compartamos la experiencia. MLT.
“Si hace unos años la profesión se encontraba ligada a un título, hoy es únicamente el punto de partida, y tenerlo ya no implica ser un profesional” d’Alòs-Moner, 2001.
De acuerdo al Banco Interamericano de Desarrollo (2016), el estudiante egresado de una Institución de Educación Superior (IES) debe dominar unas Competencias que le capacitarán para ser un profesional de excelencia al servicio de la Sociedad. Según el BID, el egresado de una IES debe poder:
Maneras de pensar
- Pensar de manera creativa e innovadora
- Utilizar el pensamiento crítico para la resolución de problemas y toma de decisiones
- Observar un proceso de metacognición (aprender a aprender)
Manera de trabajar
- Comunicarse efectivamente
- Trabajar en equipo y en armonía
Herramientas de trabajo
- Dominará las competencias de la alfabetización informacional
- Tendrá conocimiento y dominio de la alfabetización digital.
Vivir en el mundo
- Tener conciencia de su deber ciudadano tanto en su entorno como con el planeta
- Poseerá una vida y carrera productiva
- Asumirá su responsabilidad consigo mismo y con la sociedad.
Al estudiar estas competencias propuestas por el BID, podemos observar que hay una en la cual estamos totalmente comprometidos, “Dominará las competencias de la alfabetización informacional”. En este instante es que podemos comenzar a intuir la importancia del rol bibliotecario en el desarrollo de este estudiante y futuro egresado.
En este nuevo paradigma, se pretende que el estudiante, quien se convierte en el protagonista principal y mayor beneficiado del mismo, sea quien haga un descubrimiento reflexivo (concepción filosófica del Umbral ~ Threshold) de la información, o sea que comprenda y valore como se produce la misma, cuales son y cómo trabajan los sistemas de opresión y privilegio que pueden afectar el proceso (concepción filosófica de la Alfabetización informacional crítica). El estudiante también será responsable de descubrir cómo la información se usa de manera ética en las comunidades de aprendizaje (recordemos aquí la concepción filosófica de la Metaliteracia) y cómo ésta ayuda a formar el conocimiento. Esta concepción del papel del estudiante en el Marco coincide con algunas de las perspectivas del Constructivismo como las que se presentan a continuación:
- Los aprendices con individuos activos en la construcción de su propio conocimiento.
- Las interacciones sociales son importantes en este proceso de construcción de conocimiento (Brining & Schraw, Norby & Ronningn, 2004, citados en Woolfolk, 2010).
El constructivismo propone que se necesitan ambientes de aprendizaje complejos y tareas auténticas (Woolfolk, 2010), las cuales deben ser propiciadas por su maestro o guía en el proceso. Esto nos lleva a pensar en la figura del profesor dentro del Marco para la alfabetización informacional en la Educación Superior. De acuerdo al mismo el profesorado debe diseñar planes de estudio y tareas que fomenten en el estudiante aumentar el compromiso con las ideas centrales acerca de la información y en la escolaridad dentro de sus disciplinas. Esta percepción del profesor presentada en el Marco aparenta ser una muy similar a la propuesta en el constructivismo. Esto nos va dando una idea de que como bibliotecarios debemos educarnos, observar y tener un acercamiento variado a nuestra profesión.
Seeber (2015) asevera lo siguiente:
“Framework has failed to spark new and necessary conversations about the nature of our work as librarians and educators”
Como primera impresión luego de la lectura del documento Framework for Information Literacy for Higher Education no podemos identificar el papel del Bibliotecario. Este vacío produce una impresión de ambigüedad de nuestro papel en este nuevo paradigma para la enseñanza de las competencias de información.
Sin embargo el Marco menciona la figura del bibliotecario como como quien identifica las ideas fundamentales dentro de su campo de conocimientos y ver cómo estas se pueden extender e integrar al proceso de aprendizaje de los estudiantes. De igual manera el bibliotecario es el llamado a estrechar la colaboración directa con el profesorado y se sugiere que también debe trabajar en la creación de un plan de estudios afín a la alfabetización informacional. Y por si fuera poco, recordemos que somos nosotros los bibliotecarios, los llamados a desarrollar, reforzar y estimular la adquisición y desarrollo de las competencias de alfabetización informacional en los futuros egresados.
Luego de la lectura de diversas fuentes, se puede identificar más claramente algunas de las implicaciones de este cambio para los bibliotecarios académicos. Ademas tomando en consideración los acercamientos teóricos antes mencionados el bibliotecario necesita ser: educador, investigador, enlace, estudioso de la conducta estudiantil, diseñador instruccional, comunicador, LÍDER, pensador crítico, analítico… entre otras.
El papel del bibliotecario es importante, por no decir trascendental en este nuevo paradigma. Requiere que nos eduquemos, que seamos autodidactas para poder entender el Marco en si y poder transformar esas palabras en acción. El Marco NO NO NO es igual a los «estándares» a los cuales andábamos acostumbrados. El Marco requiere pensamiento, análisis, conocimiento, entrega, visión y excelente actitud. El Bibliotecario se encuentra en una nueva encrucijada de transformación, no solo de los estudiantes a quienes aprende, sino de si mismo. El Bibliotecario debe atravesar el umbral ~ threshold.
¿Quién dijo que era fácil?
Entregas anteriores:
Frameworks: Marco para la alfabetización informacional en la Educación Superior.
Obras consultadas
Association of Colleges and Research Libraries. (2015). Framework for Information Literacy for Higher Education
Baer, A. (2015). The new ACRL Framework for Information Literacy: implications for library instruction and educational reform. InULA Notes, 27, 1.
Banco Interamericano de Desarrollo. (2016). Competencias del Siglo XXI en Latinoamérica.
d’Alòs-Moner, A. (2001). El profesional del siglo XXI al servicio de la Sociedad y de las organizaciones. El Profesional de la Información. 10, 12.
Jacobson, T. & Gibson, C. (2015). First thoughts on implementing the Framework for information literacy. Communications in information literacy.
Seeber, K.P. (2015). This is really happening: criticality and discussions of context in ACRL’s Framework for information literacy. Thoughts of the Framework. Communications in information literacy, 9, 2.
Witek, D. & Stern Cahoy E. (2014). ACRL’s Framework for information literacy for higher education: implications for practice.
Muy interesante la forma en la que abordas éste tema, me ha gustado mucho tu artículo.
Felicidades!!!
Muchísimas gracias Claudia. Aquí andamos con ánimos de compartir, educarnos y educar. Saludos